Siempre se asoció el hacer buena fotografía con tener un equipo importante o tener innumerables y en algunos casos complejos conocimientos. Mi experiencia de 15 años en la docencia en Instituciones como Foto Club Buenos Aires, Foto Club Argentino, Fundación Spilimbergo me llevaron a trabajar la fotografía desde la sensibilidad más que desde la técnica, y desde la comunicación con lo que vamos a fotografiar, no estableciendo separación entre fotógrafo y fotografiado. La cámara es sólo el instrumento mecánico o electrónico necesario para captar la imagen final. Pero la cámara no hace la foto, la hacemos nosotros.